Alta Gracia, Córdoba

Histórica, encantadora y colmada de bellezas naturales, la ciudad de Alta Gracia encabeza el departamento de Santa María, Córdoba, destacándose como uno de los destinos más distinguidos del circuito de Paravachasca.

El paisaje de Alta Gracia confirma la etimología de la palabra con la que los comechingones designaron a este territorio: Paravachasca- lugar de vegetación enmarañada-, y se ubica en un amplio valle envuelto por sierras en forma de herradura.

Alta Gracia, Córdoba

Entre los atractivos invalorables de Alta Gracia, aparecen las reliquias jesuitas que perduran en su geografía; el arroyo Chicamtoltina que la atraviesa; el Parque García Lorca; los museos de diversas índoles; la casa del Che Guevara; y los dos campos de golf que cautivan aficionados.

Una excelente oferta gastronómica y hotelera completan la infraestructura de Alta Gracia, un rincón de Córdoba donde dejarse invadir por la pureza del aire y la postal embelezante del paisaje, consiguiendo la tranquilidad absoluta algunos y despertando el vértigo los aventureros.


Turismo en Alta Gracia

El turismo en Alta Gracia y sus alrededores presenta las condiciones necesarias para cautivar al espíritu. Cabalgatas, paseos, cicloturismo y circuitos de trekking recorren las sierras desde su interior, delineando un ambiente incomparable ante el paso del visitante.

En cuanto a las disciplinas náuticas, Alta Gracia ofrece excursiones hacia el Dique Los Molinos, uno de los espejos de agua más importantes de la provincia de Córdoba, y un ambiente apto para sumergirse en la práctica deportiva y la pesca de pejerrey.

Alta Gracia, Córdoba

El paracaidismo y los saltos de bautismo en tándem alcanzan el más alto grado de adrenalina en la ciudad de Alta Gracia, donde también las expediciones de montaña adquieren significación para los aventureros.

Pero también hay para quienes prefieren disfrutar de sus vacaciones en la más sublime tranquilidad. Así, el arroyo Chicamtoltina invita a relajarse y dejarse llevar por un entorno increíble, mientras los pájaros encantan los oídos y el sonido del agua reconforta el alma.