Comandante Piedra Buena, Santa Cruz

Destino turístico de magníficas particularidades, la ciudad de Comandante Luis Piedra Buena aparece en el centro este del territorio provincial, en el estuario formado por el río Santa Cruz en su unión con el río Chico. Naturaleza, historia, recreación, y la más perfecta tranquilidad, hacen de las vacaciones en este rincón patagónico un momento para no olvidar.

Piedra Buena brota en medio de la estepa santacruceña, cual oasis de verdes deslumbrantes propicios para el placentero descanso. Reservas naturales, paisajes acogedores, vivencias al aire libre, emocionantes avistajes, todo hace de esta porción patagónica un atractivo sin igual.

Caracteriza a esta ciudad la existencia en sus aguas de la trucha cabeza de acero; su cercanía a la maravillosa Isla Pavón con su espléndida apariencia, el minizoológico, el camping, y el interesante museo erigido en la réplica de la casa original del comandante; y su puerta de acceso al Parque Nacional Monte León, distinguido por las colonias de aves y mamíferos marinos, así como por los acantilados, grutas y cuevas que trazan su territorio.

En la ciudad, el arte popular, bautizado como muralismo, ornamenta las calles relatando episodios de la historia regional a quien los advierte a su paso. A lo largo de ocho cuadras, la avenida que presenta los 16 murales componentes del Parque Temático, se ha convertido en el principal atractivo y en el primer paseo a realizar.


Pesca en Comandante Piedra Buena

Erigida a pocos kilómetros de la desembocadura del río Santa Cruz, la localidad de Comandante Luis Piedra Buena constituye un verdadero milagro para los aficionados a la pesca deportiva. Allí, se capturan ejemplares significantes de especies altamente codiciadas por la práctica, pero lo más destacable es que allí puede obtenerse un pez prácticamente inexistente en el resto de los cursos de agua del mundo.

El río Santa Cruz es el único río americano de vertiente atlántica poblado por una especie singular de trucha denominada "steelhead" o "cabeza de acero". La misma es muy codiciada entre los pescadores deportivos, cuestión a la que se anexa en este caso el pesaje de nueve kilogramos con el que llegan a contar los ejemplares en la zona.

Para preservar esta especie insólita, se admite únicamente la pesca con mosca, y también con 'spining', una modalidad que utiliza cuchara de un sólo anzuelo.

Las costas de Piedra Buena se convierten en el rincón de las truchas cabezas de acero a fines del mes de febrero, momento en que las steelhead ingresan desde el Atlántico. No obstante, la temporada de pesca incluye además el período diciembre- abril, durante el cual el pescador podrá capturar percas y truchas arco iris.

Una estación de piscicultura emplazada en la Isla Pavón, aporta a la conservación y la multiplicación del recurso ictícola con su cría de salmónidos. En tanto Monte León dispone de cursos plagados de róbalos, pejerreyes y palometas de importantes proporciones, tentando al tire de línea a los amantes de la pesca.