Cruz Grande, Córdoba

Esplendoroso por dónde se lo vea, el Valle de Punilla es una de las regiones fascinantes para deleitarse con la Provincia de Córdoba. Una opción para conocerlo y disfrutarlo es Cruz Grande, una zona residencial que pertenece a la localidad de La Cumbre, ubicada a 90 kilómetros de Córdoba Capital.

Belleza esparcida por doquier, tranquilidad en su máxima expresión, y la presencia de paisajes fascinantes le brindan una cordial bienvenida al visitante que llega a este pequeño paraíso terrenal, que ofrece todo lo que tiene sin pedir nada a cambio. La presencia de las sierras va dibujando sobre el horizonte una línea ondulada que parece nunca terminar, y que es acompañada por un sinfín de verdes, durante la primavera, o el más puro blanco cuando el invierno se empeña en cubrirla de nieve.

Ideal para elegirla en cualquier época del año, sus pintorescas casonas sobre las laderas le brindan un espíritu peculiar capaz de hechizar a sus admiradores. Hoteles y cabañas que se mimetizan con esas imágenes mágicas abren sus puertas para asegurar una estadía confortable y con todos los servicios que el turista requiere.

Y por supuesto que con este entorno los paseos al aire libre y las actividades que permitan el contacto directo con esta impactante naturaleza estarán a la orden del día para no perderse ningún detalle de esta región cordobesa que promete no defraudar a quienes la visiten.


Turismo en Cruz Grande

Mezclando sierras, cubiertas por diferentes estratos de vegetación; arroyuelos que se cuelan por las quebradas, y serenidad en su máxima expresión, Cruz Grande es uno de esos lugares dónde la perfección y la hermosura de la naturaleza quedaron plasmadas en todo su esplendor.

El aire puro que la invade se suma a todos los atractivos intrínsecos de esta región e incita a recorrer los paisajes fascinantes que regala este rinconcito cordobés. Las caminatas serán una opción indiscutible para quienes prefieran una actividad relajante y que permita admirar de cerca la combinación de la flora y fauna autóctona.

Para los visitantes que gusten de descubrir rinconcitos atrapantes se imponen el trekking y las cabalgatas. Pero hay más alternativas par lanzarse por estas postales accidentadas y que también atraen a los amantes de la aventura: travesías en bicicleta, o en 4x4, recorren el relieve sinuoso y arriban a sitios únicos que posibilitan las mejores vistas al Valle de Punilla.

Además, la cercanía a un sinfín de localidades permite disfrutar de mucho más: La Cumbre ofrece su Golf Club y sus canchas de Tennis para los seguidores de estas disciplinas, y rumbo a Villa Giardino sorprende con su “Camino de los Artesanos”; Los Cocos por su parte ofrece su laberinto para divertirse; en Cuchi Corral el aladeltismo y el parapente invitan a compartir una experiencia única, admirando la zona desde las alturas. Un poco más alejadas Capilla del Monte y La Falda se suman a este circuito que se vive con todos los sentidos.