La Cumbrecita, Córdoba

Un rincón maravilloso situado en el curso superior del Río del Medio, en el faldeo de las Sierras Grandes, en el centro oeste del territorio cordobés, La Cumbrecita integra el itinerario por el Valle de Calamuchita. Pura, natural, saludable, ha merecido la categorización de primer Pueblo Peatonal y despliega ante los turistas una inigualable propuesta paseística.

Casas de tronco y balcones florecidos en colores caracterizan las calles de La Cumbrecita, una de las joyas más preciadas de la provincia de Córdoba, donde la infraestructura se halla distribuida en total respeto a la geografía y aprovechando de modo inteligente los recursos naturales.

La Cumbrecita, Córdoba

Entre sus atractivos más seductores despuntan los pinares que la rodean, especialmente en invierno cuando las nevadas pintan de blanco sus ramas; también las cascadas y vertientes que brotan de las montañas, y los puentes que cruzan el río cautivando a todo transeúnte de este sitio antecedido por un enorme estacionamiento, fiel símbolo de la restricción vehicular que lo rige.

Entre las reliquias del pueblo hay una fuente de madera de lapacho instalada en 1942, la cual posee una campanilla que los lugareños hacían sonar en casos de incendio u otras alarmas, y en la que actualmente la gente suele arrojar monedas para pedir deseos. Pero si algo encanta en La Cumbrecita, más allá de su encanto paisajístico, es su gastronomía de privilegiado refinamiento.


Turismo en La Cumbrecita

Declarada Zona de Protección Ambiental, La Cumbrecita delinea pintorescos recorridos por senderos naturales engalanados de verde y cruzados o saltados por cristalinos chorros de agua. Allí donde reina la vida, habita la tranquilidad y se manifiesta la belleza, el turismo encuentra su espacio de realización con una amplia propuesta alternativa.

La Cumbrecita, Córdoba

Para ingresar a la localidad de La Cumbrecita existe un único requisito… hacerlo caminando, y la misma modalidad rige para cada una de las cautivantes excursiones: hacia el Cerro Wank, a través del bosque de abedules; hacia las cascadas paradisíacas insertas entre rocas y vegetación; hacia atractivos histórico-culturales como la Capilla, el Cementerio; hacia puestos y casas de campo que ofrecen sus instalaciones y servicios para el pleno disfrute de jornadas diferentes.

Pesca deportiva durante todo el año; caminatas contemplativas; ascensos; safaris por paisajes maravillosos; avistajes de especies autóctonas; degustación de exquisiteces gastronómicas; descanso placentero, son algunas de las aristas de la multiplicidad alternativa de La Cumbrecita, donde cada visitante elige su propio recorrido.