Playas Doradas, Río Negro

A 28 kilómetros de Sierra Grande, Playas Doradas es un rinconcito de la Provincia de Río Negro que vale la pena conocer. Acariciada por las cálidas aguas del Océano Atlántico, despliega una variedad de opciones para entrar en contacto con la naturaleza y llevarse los mejores recuerdos.

Playas que parecen no llegar nunca a su fin reciben a los visitantes de esta villa balnearia. Seis balnearios, con toques agrestes que le otorgan mayor atractivo a la combinación del dorado de la arena y el azul de las aguas, son el escenario de los típicos juegos playeros que divierten a grandes y chicos.

Playas Doradas, Río Negro

Preparada para recibir a sus visitantes cuenta con una oferta en alojamientos que satisface todas las necesidades: un camping con todos los servicios permite disfrutar al máximo del paisaje; además se ofrecen casas y departamentos que miran al mar para no perderse en ningún momento el espectáculo de las olas sobre la costa.

Ideal para los amantes de los deportes, brinda opciones en tierra, aire y agua. Las travesías en 4x4 y el sandboard desafían a los frondosos médanos; el buceo, canotaje, esquí acuático, kite surf, y la pesca se mezclan en la inmensidad del océano; mientras los parapentes colorean el cielo y ofrecen vistas imperdibles.

Con una ubicación privilegiada, Playa Dorada permite disfrutar de un sinnúmero de sitios aledaños que prometen experiencias nuevas y emocionantes. Algunos de ellos son El Cangrejal, la Reserva Natural, la Isla de los Pájaros, entre otros igual de emocionantes.


Playas en Playas Doradas

Sobre la costa del Golfo de San Matías, Playas Doradas se destaca en la provincia de Río Negro por ofrecer extensas playas con cálidas aguas que se enmarcan en la serenidad y la belleza de los paisajes patagónicos.

Playas Doradas, Río Negro

Seis balnearios esperan a los visitantes regalando características diferentes: kilómetros de arenas finas que brillan a la luz del sol por la presencia de cuarzo y sílice, combinándose con frondosos médanos o con formaciones rocosas, son una propuesta irresistible para disfrutar de unas vacaciones al aire libe y en contacto con la naturaleza.

La cristalinidad del océano atlántico es una invitación para admirar su flora y fauna a través del buceo; para quienes prefieran transitarlas, el canotaje y la navegación a vela son algunas de las alternativas, mientras el esquí acuático y el kite surf las desafían.

La pesca se suma prometiendo la captura de especies como róbalo, sargo, corvina, pescadilla, lenguado, pejerrey y cazón.