Villa Cura Brochero, Córdoba

Un paisaje paradisíaco de gran valor histórico y religioso. Villa Cura Brochero es el punto de partida ideal si la intención está puesta en vivir las sensaciones más vibrantes de Traslasierra.

Villa Cura Brochero, Córdoba

En el corazón mismo del Valle de Traslasierra, y a la vera del río Panaholma, se extiende Villa Cura Brochero con su microclima saludable capaz de vaciar el organismo de impurezas. Enmarcada por un paisaje imponente, y reinada por la tranquilidad, esta localidad serrana combina las bondades de la naturaleza con el respeto por el legado espiritual del sacerdote José Gabriel Brochero, quien incursionó en la promoción humana realizando numerosas obras además de su debida tarea evangelizadora.

El circuito turístico religioso que caracteriza a la villa puede iniciarse en la Plaza Centenario con la admiración del monumento en bronce que se alza en honor al Cura Brochero, y continuar tan sólo cruzando la calle, con un recorrido por el Museo Brocheriano y el Santuario Nuestra Señora del Tránsito donde descansan los restos del presbítero.

Pero este paseo histórico-místico no agota la cartelera turística de Villa Cura Brochero, que se explaya en actividades como pesca deportiva, caminatas libres o guiadas, cabalgatas, ciclismo, safari fotográfico, y la posibilidad de acceder a paseos tradicionales por los senderos de Traslasierra. Otra excelente opción la constituyen los balnearios de cursos cristalinos y playas doradas, donde la familia puede disfrutar de actividades al aire libre, sol y agua refrescante.

Villa Cura Brochero es un poblado típico de Traslasierra: pequeño, escasamente poblado y de una belleza inigualable. Sulkys y caballos recorren sus calles pueblerinas en una demostración constante de la simplicidad del lugar y su gente; mientras el aroma a comida casera arroja una invitación irresistible a pasar por los humildes restaurantes locales.


Playas en Villa Cura Brochero

Un oasis entre las sierras, Villa Cura Brochero presenta una magnífica opción para vacionar en familia durante el verano. A la vera de sus extensas costaneras sobre los ríos Panaholma -de aguas cálidas- y Los Sauces -de aguas templadas-, finas arenas doradas invitan a disfrutar del sol y el aire puro, mientras los más chicos construyen castillos efímeros.

Los más límpidos balnearios, perfeccionados con los servicios necesarios para hacer de su estadía una jornada plena de placeres, se extienden brindando la posibilidad de recrearse con una multiplicidad de actividades entre las que destacan la pesca deportiva, las caminatas y cabalgatas, y las travesías en mountain bike. En tanto, toboganes de granito, caídas de agua, cursos playos y piletas naturales de gran profundidad se constituyen en ejes de diversión dispuestos para todas las edades.

El calor del verano deja de ser una carga en Villa Cura Brochero, para convertirse en la excusa ideal para regocijarse con aquello que satisface: refrescarse, dorarse al sol, jugar, hacer deportes o simplemente contemplar el paisaje apacible de las montañas.

Villa Cura Brochero, Córdoba

RÍO LOS SAUCES: playa de arena dorada extendida a escasa distancia de Los Elefantes, balneario cuyo nombre proviene de la imagen que dibujan las rocas que lo identifican.

LOS POCITOS / COSTANERA NORTE / LOS CEDROS: atractivas playas del río Panaholma que se ofrecen a los turistas con sus aguas tibias y su poca profundidad ideal para el disfrute de los niños.

NIDO DEL ÁGUILA: uno de los balnearios de la zona más concurrido por el turismo joven, así como por los arriesgados clavadistas que se animan a lanzarse hacia “el nido”.
A 4Km. de Villa Cura Brochero por calle Urquiza.

CASCADA DE TORO MUERTO: caída de agua de 8mts., ideal para el goce de los clavadistas, y enmarcada por un espléndido paisaje que invita al disfrute placentero de la familia. Un sendero serrano conduce desde allí hacia otras dos cascadas y hoyas de diferentes profundidades.
A unos 15Km. de Villa Cura Brochero

LA TOMA: balneario caracterizado por la espectacularidad de sus toboganes naturales. Se accede a éste tomando un desvío desde el Camino de los Artesanos.