Villa Ojo de Agua, Santiago del Estero

Villa Ojo de Agua es una localidad de la provincia de Santiago del Estero. Ubicada en el departamento de nombre homónimo se sitúa en el sur de la región santiagueña, allí donde predomina el aroma a algarrobos y árboles frutales. Sobre la Ruta Nacional Nº 9, se advierte entre los encantadores paisajes de las Sierras de Ambargasta y Sumampa.

Un verdadero paraje turístico que propone a sus visitantes disfrutar no sólo de las bellezas que exhibe la naturaleza, sino también de los sitios que se encuentran dentro de la urbe. La propuesta incluye lugares como la Parroquia Nuestra Señora de la Merced, la Plaza Central Manuel Belgrano, la Casa de la Cultura, las grutas de Nuestra Señora de la Merced y San Cayetano, el Cerro de la Cruz, la Casa del Artesano y el Museo de Bellas Artes Absalón Argañaráz.

Entre las ofertas que la Villa presenta a los viajeros las practicas de turismo alternativo en los diversos ambientes que combinan suaves lomadas y pequeños arroyos resultan experiencias imperdibles y sumamente cautivantes para los curiosos e inquietos recién llegados a la ciudad. Caminatas, paseos en bicicleta, trekking, alpinismo y avistaje de flora y fauna se suman a la refrescante convocatoria que hacen los balnearios Cantamampa y Dique Báez.

Comunidad que nace aproximadamente en el siglo XVI con la instalación de un fuerte, se destaca por la producción cultural entorno a la artesanía regional. El Festival Nacional del Artesano es uno de los espectáculos más llamativos y atractivos de la Villa. La gastronomía es una de las fortalezas de Ojo de Agua, una de las actividades que distingue al lugar y donde los turistas se deleitan con los exquisitos platos tradicionales.


Balnearios en Villa Ojo de Agua

La pintoresca Villa ubicada al sur de la provincia de Santiago del Estero cuenta con una variedad de atractivos que cautiva, en cada instante, a los amantes de la naturaleza y la tranquilidad de las ciudades del interior del país.

Los turistas que visitan la localidad de Ojo de Agua pueden disfrutar de los encantadores paisajes que combinan lomadas, vegetación y afluentes de agua donde refrescarse cuando el calor de los días estivales lo exige. Sobre las tranquilas aguas del arroyo Cantamampa se encuentran dos balnearios. Uno de ellos, de nombre homónimo, cuenta con las comodidades y servicios necesarios para desarrollar actividades de camping y una pileta de natación.

Una distancia de 25 kilómetros separa la Villa del Dique de Báez, un imperdible rincón para recrearse y contemplar los bellos panoramas de la región. En el sitio puede practicarse también la pesca deportiva y relajarse en el Cantamampa. Su construcción surgió con el propósito de encajonar las aguas de los arroyos que pasan por allí, hacia finales de la década de 1940.

El arroyo Lascano ofrece otras panorámicas en las que el curso transita saltos en medio de las rocas. Los tramos más tranquilos de su caudal convocan a nadar y recorrer los paisajes que exhiben los cerros sureños. Acompañado de una frondosa vegetación, el predio brinda una excelente estadía.